Episodio 28 de Vento Aureo

Tantas victorias contra rivales difíciles nos habían acostumbrado a que no hubiera bajas entre los protagonistas. El Boss no iba a perdonar a los traidores y esta semana, a pesar de lo malparado que había quedado tras su enfrentamiento con Nero, logró que la suerte volviera a sonreirle y se cobró una nueva víctima que conocíamos bien.

Nuestro expolicía, el antipático de gran corazón, ese que parecía más serio y maduro que los demás, pero que en realidad estaba tan loco como ellos, nos dice adiós de forma brusca, pero nos queda el consuelo de que su muerte no ha sido en vano.

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Desde que descubrió que Bucciarati y sus hombres se habían fijado en aquella foto tomada por él hacía quince años, el Boss supo que tarde o temprano Moody Blues se trasladaría a ese mismo lugar e intentaría remontarse a aquella fecha para transformarse en quien estuvo delante de Donatella en el instante  inmortalizado por él y que el stand de Abbacchio mostraría el aspecto que tenía en aquél tiempo. Con su obsesión por ocultar su identidad, no podía permitir que su mayor secreto saliera a la luz delante de los traidores, así que el expolicía ya era el primero de su lista negra.
Paradójicamente, el stand menos adecuado para la lucha era el que más miedo le inspiraba.

Los poderes de Abbacchio se habían refinado. Nunca había "rebobinado" su stand tan atrás en el tiempo  y ahora, presionado por Bucciarati iba a poder hacerlo en sólo unos pocos minutos.

Incluso el display de su cronómetro se había adaptado a este aumento de poder, mostrando  ahora también  el año y el mes.

¡Quién sabe hasta dónde podría haber llegado si hubiera tenido la oportunidad de continuar evolucionando!. Quizás hubiera sido capaz de desvelar los grandes secretos de la Historia o de esclarecer cualquier crimen. Moody Blues era un stand genial.

La muerte de Abbacchio trae un poco a la memoria la de otro personaje muy querido y también cruelmente asesinado: Kakkyoin, de la tercera parte.
No sólo ambos mueren del mismo modo: atravesados por el puño del villano más poderoso, si no que tanto el uno como el otro dejarán, con sus últimas fuerzas, un mensaje antes de morir,  que resultará muy util a sus compañeros. Si Kakyoin desvelaba el secreto del poder de DIO, Abbacchio revela el rostro del Boss.

Moody Blues había alcanzado por fin el momento del pasado que buscaba. Y un instante antes de morir, Abbacchio hace que su stand se empotre con fuerza en el monumento en que la madre de Trish se apoyara años antes, cuando le tomaron  la famosa  foto. Lo hace, fuera de cámara y con tanta fuerza, que la mano y la cara del Boss quedan grabados en la piedra como si esta fuera un molde.

Giorno, que ya ha demostrado ser el más sagaz del equipo y que nunca le cayó demasiado bien a Abbacchio, será el receptor del mensaje póstumo. Algo en lo que los demás no habían reparado, pues estaban demasiado perturbados como para fijarse en los detalles.
Aunque no quería reconocerlo, Abbacchio valoraba las virtudes del novato y su gran inteligencia, por lo que su último mensaje iba destinado a él. Sabía que él se daría cuenta de que el fragmento de piedra que sujetaba en su mano sería una pista clara que le haría ver que el antiguo policia había logrado cumplir su misión a pesar de todo.

Pero ¿ Cómo pudo recuperarse el Boss tan rápido y recobrar las fuerzas suficientes como para llegar hasta Abbachio y asesinarlo?
Volviendo al comienzo del episodio, encontramos a Risotto Nero, acribillado por los proyectiles de Aerosmith, a punto de morir.

También él y esto es característico de Vento Aureo, intentará cumplir su objetivo antes de exhalar el último suspiro, haciendo un último esfuerzo para llevarse con él al más allá a su rival. Pero al contrario que con Abbacchio, no lo logrará y dejará este mundo sin haber visto bien el rostro del Boss, ya que lo tiene muy cerca, pero a contraluz y sin la satisfacción de consumar su venganza.
A pesar de su determinación, la suerte nunca estuvo del lado de los asesinos de la Squadra.

El Boss está muy débil debido a la falta de hierro y la hemorragia  que ha causado el ataque de Metallica,  pero consigue activar a King Crimson borrando el medio segundo que necesita para apartarse a tiempo del fuego de Aerosmith y salvar la vida.

Con sus últimas fuerzas, Risotto activó a Metallica en  su propia sangre, que había salpicado a Aerosmith y con sus poderes magnéticos atrajo hacia sí al stand de Narancia, para forzarle a disparar contra él y el Boss, al que sujetó fuertemente contra su cuerpo.
Si su enemigo hubiera estado un poco más débil, habrían muerto los dos. Pero la fuerza de voluntad del Boss tampoco se queda atrás y estando tan cerca de Risotto, su King Crimson no podía fallar. Borra los instantes en que habría sido alcanzado por los proyectiles evitando que ocurra.

Risotto muere con su orgullo intacto, al no hacerlo delante de los hombres de Bucciarati ni concederle al Boss su petición de devolverle el hierro que había extraído de su sangre.
El líder de la Passione tiene unas palabras de respeto y reconocimiento hacia su antiguo subordinado, único hasta eese momento en ser capaz de ponerle contra las cuerdas. Acaba así este peculiar combate en que nada menos que King Crimson, Epitaph y Aerosmith combinados junto con un poco de suerte a su favor, se alían para derrotar a Metallica, un stand casi microscópico.

Cuando esta extraña batalla finaliza, el Boss ni siquiera puede caminar y Bucciarati y los suyos están ya muy cerca.

Para recuperar la sangre y el hierro que ha perdido, Diavolo devora una rana (me pregunto cómo hay tantas ranas en un terreno rocoso y seco) y también ataca a un niño que jugaba cerca de ahí. Le silencia cosiendo su boca con el cordón de las zapatillas del chaval, (algo a lo que parece aficionado, ya que también cosió la boca de su madre en el pasado) y como si fuera un vampiro, bebe la sangre del chico tras hacerle un corte en la muñeca.
Bucciarati y Narancia se horrorizan al descubrir al niño en ese estado y no dudan en que el causante tiene un stand, pero aún no están seguros de que se trate del propio Boss.

La joven víctima no solo le sirve al Boss para recuperar fuerzas. Se pone su camiseta y logra camuflarse entre el grupo de chicos que juegan al futbol cerca de donde se encuentra Abbacchio con su stand.
¿Cómo logra pasar desapercibido siendo un adulto? Aunque tome la apariencia de Doppio, no es facil hacerse pasar por un niño. ¿Acaso el Boss puede modificar aún más su cuerpo para aparentar menos edad? En realidad, no es que parezca un niño. La pandilla de críos de varias edades es muy grande y los demás no se han fijado demasiado en él, se ha camuflado entre el grupo.
En el manga todo parece más lógico, además, en las páginas en blanco y negro es más difícil fijarse en que el enemigo se encuentra cerca. En el anime, se distingue el característico pelo rosa de Doppio y no resulta tan sorpresivo.

Abbacchio ayuda a los niños a recuperar su balón y estos corren junto a él, dándole las gracias. Uno de ellos, con una camiseta con el número tres en el dorsal, que se había rezagado, se le acerca repentinamente...y le ataca con su stand. Rápida y certeramente. Los otros jóvenes ni siquiera se han dado cuenta.

A pesar de la vigilancia constante de Giorno y Mista y de la prudencia de Bucciarati, ninguno de ellos ha podido evitar la desgracia.

Cuando descubren el cuerpo de su compañero, sin vida, les embarga el dolor. Bucciarati se siente culpable y con frialdad, insta a los demás a marcharse de allí cuanto antes, sin darles si quiera tiempo a recoger o velar a Abbacchio. Narancia es el que reacciona de forma más expresiva. Primero se niega a aceptar lo sucedido y luego pide a Bruno que no dejen solo a su amigo. Pero quedarse ahí es demasiado peligroso y Narancia por fin lo entiende.
Cuando se disponen a partir, Giorno les muestra que Abbacchio logró su objetivo. Por fin, una pista importante.

Si estas escenas son ya muy emotivas y nos ponen un nudo en la garganta, la parte más hermosa del episodio sin duda es la que representa el alma de Abbacchio a punto de partir.
Lo vemos, como si fuera una película en blanco y negro, en la terraza de un restaurante, donde se encuentra con un policía con el que mantiene una conversación.

Abbacchio se lamenta de no haber sido capaz de ser un buen agente, tal como había deseado siempre y su interlocutor  le contradice, asegurando que él siempre ha triunfado en su empeño por sacar a relucir la verdad y le llama por su nombre, como si le conociera.
Entonces la escena se llena de luz y color y Leone se da cuenta de que se encuentra ante el policía que murió por su culpa en el pasado. Esa espina que el dueño de Moody Blues siempre tuvo clavada en el corazón. El hombre le ha perdonado y le sonríe.

Abbacchio ya no puede subirse al bus que le lleve junto a sus amigos. No hay viaje de vuelta, es la última parada. Pero no está solo. Su imagen se desvanece en el cielo de Cerdeña acompañado de su amigo de juventud y con el corazón sereno. Su espíritu ha encontrado por fin la paz con la satisfacción de haber cumplido su misión.

A mí personalmente me parece una secuencia preciosa, que me hizo soltar alguna lágrima. En partes posteriores de Jojo morirán algunos personajes importantes y Araki no les dará una despedida tan digna, algo que a mí siempre me ha molestado. Pero no pondré ningún ejemplo para evitar spoilers.

Te echaremos de menos, Leone.
Fugo abandonó y ahora nos deja Abbacchio. El equipo de Bucciarati se hace pequeño.

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El episodio, dramático y muy importante, ha tenido su lado un poquito negativo, como es un dibujo no demasiado bueno en gran parte de sus escenas, pero que ha compensado con creces con unos detalles geniales.
Por ejemplo, la luz.
Cuando Abbacchio se dispone a activar a Moody Blues, mira un instante el cielo y de pronto, una nube oculta el sol. Es un mal presagio que el anime refleja muy bien con este recurso y con la música de fondo.

También vemos cómo las pupilas rojas de Risotto se iluminan cuando este, poco antes de morir, hace acopio de su última energía para intentar llevarse consigo al infierno a su enemigo.
O cómo las nubes vuelven a retirarse y el sol se posa de nuevo sobre el rostro de Abbacchio, que yace sobre las rocas, haciéndole brillar.

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Otro detalle que hemos podido apreciar es que si los poderes de Abbacchio habían aumentado, también Narancia ha aprendido a sacar aún más partido de su stand.
Por un lado, sus disparos son cada vez más potentes: su fuego destroza a Risotto Nero, incluso le arranca una mano.
Y su radar también se ha refinado. Puede detectar presencias de forma mucho más precisa que antes según le convenga.

Las dotes de deducción de Bucciarati también son muy destacables. Simplemente observando el cadáver de Risotto es capaz de averiguar de quién se trataba y que  había alguien más luchando con él, es decir, que no había sido víctima sólamente del fuego de Aerosmith. Por desgracia, esa inteligencia no le bastó para proteger a Abbacchio, y es algo que le pesará mucho.

*** CURIOSIDADES***

En la reseña anterior comenté que Narancia habría disparado contra Risotto casi al azar, sin saber lo que hacía y que actuando así podría haber herido a inocentes...Pues bien, error mío. No recordaba que para llamar su atención y provocarlo, el Boss había lanzado en dirección a los protagonistas, los escalpelos que previamente le había arrojado Risotto. Así tiene más sentido que Aerosmith atacase la posición de  Risotto. Sticky Fingers detiene los bisturís mientras Narancia abre fuego.

También olvidé comentar que el stand de Risotto Nero me recordaba un poco a los Kodama, unas pequeñas criaturas del bosque de la maravillosa película del Studio Ghibli "La Princesa Mononoke". Aunque desde luego, no son tan monos.

Hablando de Metallica, este stand aparece ya en las imágenes del ending, sumándose así a todos los que han aparecido hasta ahora en Vento Aureo.

En el manga hay un breve relato sin viñetas del pasado de Risotto Nero, en el que nos cuentan cómo se convirtió en asesino en su adolescencia por venganza. Lo han omitido en el anime y aunque me apena, reconozco que no aportaba demasiado a la trama principal ni encajaba  en la trama. Aún así, no pierdo la esperanza de que lo animen en algun episodio especial o un flashblack...

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El Boss bebe sangre de ranas y de un niño para recuperar las fuerzas. Obviamente, esto es ciencia ficción. Uno no se recupera así de una hemorragia ni de la anemia. Pero es impactante y a Araki le gusta sorprendernos con detalles escabrosos.

En el manga, los niños que juegan al futbol son más numerosos y llevan camisetas de distintos equipos. En el anime, sin embargo, han preferido vestirlos a todos con los colores de la selección italiana.

La escena en que el Boss ataca a Abbacchio es incluso más brutal  en el manga que en la serie. resulta más abrupta e inesperada y la viñeta tiene mucha fuerza.

******COMPARACIONES MANGA/ANIME**********

El próximo episodio es otro especial. Por el título, más que un resúmen de capítulos anteriores podría estar relacionado con un stand que en el manga aprece al final de la quinta parte, como una especie de epílogo. No me parece que sea el mejor momento para insertar estos hechos, ya que podría revelar información sobre hechos que aún no han sucedido en el anime...Si no me equivoco y esto es lo que nos trae el viernes siguiente, habrá que ver hasta que punto es así.