Episodio 37 de Stardust Crusaders

Un alianza tan disparatada como la que forman Hol Horse y Boingo sólo podía dar como reultado uno de los capítulos más divertidos de la temporada.
Stardust Crusaders es la parte de Jojo donde más abunda el sentido del humor.
Eso no quita que no haya también drama o que no vayamos a sufrir con los personajes.
En este episodio sin embargo, nos podemos relajar y echar unas risas.
Toth, el stand de Boingo nunca miente, pero a veces no es fácil descifrar la verdad que describe.

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La semana pasada dejamos a Hol Horse con los dedos en las narices de Polnareff, tal como indicaba el comic de Boingo, pero sin saber qué hacer a continuación.

El francés logra zafarse del agarre, pero cuando va a utilizar su stand, Emperor ya le está apuntando: la bala es más rápida que la espada.

A pesar de todo, el pistolero no puede apretar el gatillo: Jotaro, Joseph y Abdul están muy cerca y no quiere que el sonido del disparo les alerte: no es lo suficientemente fuerte como para batirse con los cuatro a la vez. Con Boingo no puede contar para luchar.

Entonces,  se ve forzado a improvisar. Se oculta en un callejón, detrás del francés mientras le encañona en la nuca. Polnareff tiene que fingir que no ocurre nada y convencer a sus compañeros para que se adelanten y le dejen solo. De lo contrario, recibirá un balazo.

Y entonces viene una de las escenas más desternillantes de la serie. Polnareff actúa como si no pasara nada, pero al mismo tiempo, ya que Hol Horse está detrás de él y no puede verle la cara, hace todo tipo de muecas para dar pistas a sus amigos, que no acaban de entender sus señales. Los gestos desencajados de Jean-Pierre no tienen precio.
Es una pena que el anime haya sido algo más moderado con estas muecas que el manga.

 

Me hubiera encantado ver esta cara casi picassiana en el anime:

En general, la serie suaviza siempre un poco la fealdad de los personajes, sobre todo paseantes, o secundarios de fondo que en el manga son mucho más caricaturescos, más grotescos. El propio Boingo  es bastante menos mono en las viñetas de Araki.

Estos obreros siguen siendo horrorosos, pero al menos parecen más humanos que en su versión en papel:

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La demostración de mímica con lengua de Polnareff tarda en ser comprendida por  Joestar y los demás, pero finalmente, Abdul averigua qué trata de decirles. Quizás ha jugado más al Pictionary que los otros.

Horse sabe que le han descubierto y está a punto de disparar a Polnareff, pero este estornuda de repente haciéndole perder el equilibrio y dejándolo en evidencia ante los demás. Silver Chariot reacciona en seguida y Hol Horse, derribado en el suelo y rodeado, parece tenerlo todo en contra esta vez.
Meter los dedos en la nariz del francés ha provocado que estornudara, lo cual por ahora no ha traído las consecuencias que el pistolero esperaba.

Pero Toth es infalible. Sus predicciones siempre se cumplen y si mostraba a sus enemigos derrotados y ensangrentados, así sucederá.
En ese momento pasa por allí un camión en el que viajan unos individuos que habían tenido un altercado con Horse en el episodio anterior. Lo ven tirado en el suelo y al reconocerlo deciden atropellarlo para vengarse. Pero el americano ha volcado una vasija de aceite al caer  y el vehículo, que va a toda velocidad, resbala en el líquido esquivando a Horse y estrellándose contra la pared.
Al chocar se lleva por delante a los protagonistas, que no lo vieron venir.
Ha ocurrido lo que mostraban los dibujos.

A pesar de lo aparatoso del accidente, ninguno ha perdido la vida. Pero Hol Horse podría haber aprovechado que estaban inconscientes para rematarlos.
¿Hubiera logrado acabar con ellos si en lugar de obedecer las instrucciones de Toth hubiera usado su Emperor contra ellos?
No, porque no estaba escrito en su destino.

Aparecen nuevas viñetas en el libro mágico. En ellas se ve a Jotaro, que ya ha recuperado el conocimiento, con la frente atravesada por las balas de Emperor. Hol Horse lo celebra, pero desconfía, ya que está al corriente de  lo que le sucedió a Oingo. Sin embargo, decide volver a tener fe en su aliado y seguir las instrucciones de su stand.

¡¡Pero la predicción se cumplirá si lo descrito en el comic se lleva a cabo a las doce en punto!!. Sólo le quedan dos minutos para pagar a unos obreros para que abran una tubería y disparar a través de ella. A mediodía en punto, teóricamente, las balas saldrán por otro tubo que se encuentra muy cerca del joven Joestar y lo herirán en la cabeza.

Y  esa lucha contrarreloj para lograr su objetivo es otra escena hilarante, pues todo parece estar en contra de los rivales de los Joestar: los obreros no son fáciles de convencer, Horse no lleva dinero encima, el que tiene Boingo son monedas que se le caen al suelo, les interrumpen....El pistolero pierde los nervios viendo que ya casi es la hora y no lo va a conseguir.

Hol Horse nos proporciona tanta diversión y tiene tan mala suerte, que es imposible no terminar cogiéndole cariño a pesar de no ser precisamente una buena persona.

Sin embargo, su empeño da fruto y consigue disparar dentro de la tubería a la hora señada, según marca su reloj.
Pero Polnareff vuelve a estornudar, hace que Jotaro se eche hacia atrás  y las balas yerran su objetivo. ¿Por qué no se ha cumplido el vaticinio?

En algun momento, sobre todo en el manga, las miradas de Jotaro hacen pensar que sospechaba algo justo antes de que las balas fallasen...Puede que sí que lo presintiera, aunque finalmente, al no haber consecuencias, no llega a saber lo que ha ocurrido.

Los protagonistas van recobrando el sentido y recuperándose. El incidente del camión no ha sido tan grave como parecía. Curiosamente, nadie se preocupa de los individuos que iban al volante... No es muy políticamente correcto tratándose de "los buenos" que ignoren totalmente a las víctimas de un accidente. En realidad, no tienen tiempo para eso. Deben salir de allí antes de que llegue la policía haciéndoles perder un tiempo del que no disponen. Por no hablar de que algunos de ellos ya están en busca y captura por incidentes de pasados episodios.

Hol Horse descubre que ha cometido un gran error: su reloj está adelantado. Ha disparado antes de tiempo. Vuelve a mirar  el libro de Boingo y la viñeta de Jotaro herido para asegurarse que nada ha cambiado. En ese momento dan las doce y el destino se cumple.
Las balas, una vez errado el tiro, regresan a su stand. Es decir, vuelven a su dueño.
Jotaro es finalmente alcanzado. Pero no el Jotaro de carne y hueso, si no el que aparece dibujado en el libro.

Como Hol Horse lo sostenía en ese momento,  atraviesan el papel y alcanzan al pistolero. Él mismo ha labrado su propio destino: sus malas acciones se vuelven contra él.

La munición de Emperor atraviesa a Jotaro (el de papel) exactamente en los puntos que indicaba la viñeta.

El pistolero no pierde la vida, pero queda definitivamente fuera de combate. Ya no volveremos a verlo.
¿Por qué Boingo no resulta también herido si su stand ha sido dañado? No nos lo explican, pero una respuesta podría ser que quien dirige realmente a Toth no es el muchacho, si no el propio destino.
Un destino que por segunda vez, no ha sido lo suficientemente fuerte para vencer a la buena fortuna que parece guiar los pasos de Jotaro.
Ante un emenigo así, Boingo llega a pensar que no podrá derrotarlo nunca, sólo alguien tan poderoso como DIO estaría a la altura y por un instante se plantea cambiar de vida, hacer el bien y tratar de superar su pánico a la gente.

Pero Iggy le saca de sus ensoñaciones y le devuelve a la cruda realidad. En su entusiasmo, Boingo ha pateado la caja donde se escondía,golpeando accidentalmente al perro y el animal le ataca violentamente. Como consecuencia, Boingo no sólo no se enmienda, si no que se vuelve más miedoso y huraño si cabe. Pero al menos parece que se le han quitado las ganas de seguir incordiando a los protagonistas.

El mal genio del chucho no es moco de pavo.

Dos enemigos más, para colmo reincidentes, han sido totalmente derrotados.
Los Joestar no saben qué ha sido de ellos, pues nuevamente, no han tenido que hacer prácticamente nada para apartarlos de su camino. Algo magullados, prosiguen su búsqueda, ya muy cerca de DIO.

Los dos próximos episodios estarán protagonizados por Iggy, que también tiene derecho a un poco más de relevancia. Su rival, representante del dios Horus, pertenece también al reino animal, lo que no le hace menos peligroso.
 


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Algunas imágenes comparativas:

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Los protagonistas de esta semana y la anterior en las viñetas de Toth. No salen muy favorecidos.

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Y para cerrar esta entrada, algunas capturas más. Han hecho un buen trabajo con Hol Horse en el anime: