Una semana más, dejo aquí mis comentarios sobre el último capítulo emitido en Japón de la serie de anime de Jojo.
Si no lo has visto aún, puedes hacerlo online AQUÍ o descargarlo AQUÍ.
En el capítulo anterior dejamos al trío protagonista adentrándose en Wind Knights Lot, un pueblo aislado, rodeado de montañas donde antiguos caballeros solían entrenarse y que ahora ha convertido la vieja fortaleza en prisión y vive de la pesca y de sus minas de carbón. Este es el lugar que Dio ha escogido para iniciar su reinado como representante de una raza superior.
En un momento de despiste de los protagonistas, un niño, Poko, hipnotizado por Dio, les arrebata el equipaje, forzándolos a perseguirle y llevarles a un viejo cementerio donde les aguardan un montón de muertos vivientes...
...y el propio Dio, que tiene un primer enfrentamiento con Zeppeli ayudado por Jonathan del que los chicos buenos no salen muy bien parados.
Tomándolos por rivales poco dignos, Dio se retira y deja la tarea de acabar con ellos a dos caballeros de María Estuardo, enterrados allí mismo y ejecutados siglos atrás gracias a un engaño. Por obra del vampiro, han vuelto a la vida para desatar todo el rencor de la injusticia cometida contra ellos.
Se trata de dos excepcionales guerreros, Tarkus y Blufford. Este último se enfrenta a Jonathan bajo el agua.
No comentaré ya nada acerca de la censura, a la espera de la edición en DVD y Blu-Ray donde muy probablemente ya no tendremos ese inconveniente.
Pero en lo que sí insistiré es en el ritmo acelerado, que hace que se omitan, o se narren de forma muy torpe algunos momentos que en el manga resultan divertidos.
Me refiero sobre todo a las escenas de Speedwagon.
Este hombre de los suburbios, a pesar de haber vivido siempre en los bajos fondos tiene un fuerte sentido del honor y la moral, es voluntarioso y valiente, pero comparado a Jonathan y Zeppeli y a los enemigos que tienen enfrente, mucho más débil.
Zeppeli lo menosprecia desde el primer momento. Cuando Speedwagon le pide que le enseñe a él también la técnica del "hamon", el maestro no le toma en serio. Finalmente, para que deje de molestarle, le aplica el golpe en el diafragma que activa la respiración especial que requiera la técnica, sólo que calcula mal y le hace daño.
Esta escena, muy divertida en el manga, está tan rápida y torpemente adaptada al anime, que alguien que no haya leído el comic apenas entenderá qué ha sucedido.
De derecha a izquierda:
-¡Entonces, Zeppeli!...¿Podría yo también aprender lo de las "ondas" esas?
- ¡Quiero intentarlo, enséñeme!
-¡Imposible! -¡¿Qué?! ¡¿por qué?!
-¡Hey, maldita sea, ¡por qué no puedo, bastardo?! ¡¡Dígamelo!!
-Incluso en este momento, Jojo mantiene el método de respiración que le enseñé.
No es fácil respirar de forma especial inconscientemente y en todo momento, de noche y de día, dormido y despierto.
-Sólo uno entre cien mil tiene esa aptitud. Y Jojo tiene esa increíble fuerza de voluntad, proporcionada por el triste pasado y el duro futuro que acarrea sobre sus hombros.
-Yo logré aprender esta técnica de 5000 años de historia tras entrenar durante décadas con un maestro del Tíbet..
-Speedwagon, sabes muy bien que no estás lo suficientemente curtido para ello.
-¡Puede ser! ¡Pero yo quiero ayudar! ¡¿Está diciéndome que me quede sólo mirando, Zeppeli, bastardo?!
-¡Dio está en algun lugar de este pueblo!. ¡No puedo perdonar a ese bastardo. Yo robo cosas, pero él roba vidas!
-Hmmm... Bueno, de momento, si estimulo los músculos de tu diafragma, que mueven los pulmones, deberías ser capaz de crear pequeñas ondas.
-¡¡¿DE VERDAD?!! ¡¡Inténtelo!!
-Hum...Puede que duela un poco al principio, ¿de acuerdo?
-¡De acuerdo, adelante, no me importa!
-¡Vamos allá!
-¡Vale!.
-Zeppeli, ¿ocurre algo malo?
-Ah...no.
-He calculado un poco mal y se me ha resbalado el dedo. ¡Lo siento, Speedwagon!
Otro de los momentos más divertidos de Speedwagon, tampoco queda bien reflejado en el anime. Me refiero a cuando, tratando de imitar a Zeppeli y Jonathan, que gracias al "hamon" pueden caminar sobre el agua, se hunde miserablamente en el río.
Pero para comentar también algo positivo del episodio diré que Tarkus y Blufford quedan tan terroríficos e impresionantes como cabía esperar.
El capítulo termina con Jonathan a punto de lanzar un nuevo ataque, invitándonos a averiguar la próxima semana si tendrá éxito o no. Un viejo recurso que siempre funciona.
El ending vuelve a sorprendernos, sonando esta vez no el principio, si no el final del tema de Yes.
Se repiten las imágenes que vimos la semana pasada, pero desaparece Erina y en su lugar, podemos ver a los Caballeros Negros, Tarkus y Blufford.
La semana que viene, puro combate. Me pregunto si con la rapidez con que sucede todo, estas peleas, que ocupan bastantes páginas del manga darán para uno o varios episodios de anime.
Si no lo has visto aún, puedes hacerlo online AQUÍ o descargarlo AQUÍ.
En el capítulo anterior dejamos al trío protagonista adentrándose en Wind Knights Lot, un pueblo aislado, rodeado de montañas donde antiguos caballeros solían entrenarse y que ahora ha convertido la vieja fortaleza en prisión y vive de la pesca y de sus minas de carbón. Este es el lugar que Dio ha escogido para iniciar su reinado como representante de una raza superior.
En un momento de despiste de los protagonistas, un niño, Poko, hipnotizado por Dio, les arrebata el equipaje, forzándolos a perseguirle y llevarles a un viejo cementerio donde les aguardan un montón de muertos vivientes...
...y el propio Dio, que tiene un primer enfrentamiento con Zeppeli ayudado por Jonathan del que los chicos buenos no salen muy bien parados.
Tomándolos por rivales poco dignos, Dio se retira y deja la tarea de acabar con ellos a dos caballeros de María Estuardo, enterrados allí mismo y ejecutados siglos atrás gracias a un engaño. Por obra del vampiro, han vuelto a la vida para desatar todo el rencor de la injusticia cometida contra ellos.
Se trata de dos excepcionales guerreros, Tarkus y Blufford. Este último se enfrenta a Jonathan bajo el agua.
*****
La calidad de la animación, que había mejorado en el capítulo anterior, vuelve a empeorar, con exceso de imágenes fijas incluso en momentos de acción.No comentaré ya nada acerca de la censura, a la espera de la edición en DVD y Blu-Ray donde muy probablemente ya no tendremos ese inconveniente.
Pero en lo que sí insistiré es en el ritmo acelerado, que hace que se omitan, o se narren de forma muy torpe algunos momentos que en el manga resultan divertidos.
Me refiero sobre todo a las escenas de Speedwagon.
Este hombre de los suburbios, a pesar de haber vivido siempre en los bajos fondos tiene un fuerte sentido del honor y la moral, es voluntarioso y valiente, pero comparado a Jonathan y Zeppeli y a los enemigos que tienen enfrente, mucho más débil.
Zeppeli lo menosprecia desde el primer momento. Cuando Speedwagon le pide que le enseñe a él también la técnica del "hamon", el maestro no le toma en serio. Finalmente, para que deje de molestarle, le aplica el golpe en el diafragma que activa la respiración especial que requiera la técnica, sólo que calcula mal y le hace daño.
Esta escena, muy divertida en el manga, está tan rápida y torpemente adaptada al anime, que alguien que no haya leído el comic apenas entenderá qué ha sucedido.
De derecha a izquierda:
-¡Entonces, Zeppeli!...¿Podría yo también aprender lo de las "ondas" esas?
- ¡Quiero intentarlo, enséñeme!
-¡Imposible! -¡¿Qué?! ¡¿por qué?!
-¡Hey, maldita sea, ¡por qué no puedo, bastardo?! ¡¡Dígamelo!!
-Incluso en este momento, Jojo mantiene el método de respiración que le enseñé.
No es fácil respirar de forma especial inconscientemente y en todo momento, de noche y de día, dormido y despierto.
-Sólo uno entre cien mil tiene esa aptitud. Y Jojo tiene esa increíble fuerza de voluntad, proporcionada por el triste pasado y el duro futuro que acarrea sobre sus hombros.
-Yo logré aprender esta técnica de 5000 años de historia tras entrenar durante décadas con un maestro del Tíbet..
-Speedwagon, sabes muy bien que no estás lo suficientemente curtido para ello.
-¡Puede ser! ¡Pero yo quiero ayudar! ¡¿Está diciéndome que me quede sólo mirando, Zeppeli, bastardo?!
-¡Dio está en algun lugar de este pueblo!. ¡No puedo perdonar a ese bastardo. Yo robo cosas, pero él roba vidas!
-Hmmm... Bueno, de momento, si estimulo los músculos de tu diafragma, que mueven los pulmones, deberías ser capaz de crear pequeñas ondas.
-¡¡¿DE VERDAD?!! ¡¡Inténtelo!!
-Hum...Puede que duela un poco al principio, ¿de acuerdo?
-¡De acuerdo, adelante, no me importa!
-¡Vamos allá!
-¡Vale!.
-Zeppeli, ¿ocurre algo malo?
-Ah...no.
-He calculado un poco mal y se me ha resbalado el dedo. ¡Lo siento, Speedwagon!
Otro de los momentos más divertidos de Speedwagon, tampoco queda bien reflejado en el anime. Me refiero a cuando, tratando de imitar a Zeppeli y Jonathan, que gracias al "hamon" pueden caminar sobre el agua, se hunde miserablamente en el río.
Pero para comentar también algo positivo del episodio diré que Tarkus y Blufford quedan tan terroríficos e impresionantes como cabía esperar.
El capítulo termina con Jonathan a punto de lanzar un nuevo ataque, invitándonos a averiguar la próxima semana si tendrá éxito o no. Un viejo recurso que siempre funciona.
El ending vuelve a sorprendernos, sonando esta vez no el principio, si no el final del tema de Yes.
Se repiten las imágenes que vimos la semana pasada, pero desaparece Erina y en su lugar, podemos ver a los Caballeros Negros, Tarkus y Blufford.
La semana que viene, puro combate. Me pregunto si con la rapidez con que sucede todo, estas peleas, que ocupan bastantes páginas del manga darán para uno o varios episodios de anime.
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